En un mundo sumergido en los entornos digitales ya se ha convertido en hábito y rutina de todos iniciar el día revisando nuestras redes sociales, las noticias por los diferentes portales o comprar y pagar de manera online, y por lo mismo, hacemos procesos muchas veces sin pensarlo o detenernos a verificar si nos encontramos en plataformas seguras, llevándonos a correr riesgos de ciberseguridad.
Por eso queremos compartir contigo una serie de hábitos que conllevan a poner en riesgo nuestra seguridad online:
- Publicaciones
Cualquier información que publiques en internet permanecerá allí y no será olvidada. Por ello analiza si realmente no tienes problema que esa información se mantenga online y para siempre y no llegue a perjudicarte en un futuro.
- Aceptar términos de servicio y condiciones
Sabemos que no eres el único que, al ver un extenso acuerdo de términos y condiciones al instalar una app, ingresar a un sitio web o enviar un formulario, lo pasas de largo; pero ten en cuenta que precisamente por ese terrible hábito los desarrolladores y dueños de las plataformas aprovechan para esconder condiciones que ponen a su total disposición tu información personal y datos de usuario. Así que te invitamos a tomarte ese tiempo tan necesario para analizarlos antes de decir que aceptas.
- Descargar aplicaciones
En ocasiones queremos que las aplicaciones de nuestros celulares gestionen nuestra música, rutina fitness o check list, pero algunas veces descargamos e instalamos tantas que debemos permitirles ejecutar permisos para que puedan ingresar a nuestros dispositivos, es allí cuando también exponemos nuestra privacidad y les ofrecemos control de diversas funciones de nuestros equipos.
- Ignorar las actualizaciones
Si, a veces los procesos de actualización pueden ser incómodos, pero ¿sabías que estas permiten que tu dispositivo permanezca protegido de vulnerabilidades y que el 99% de los equipos con Windows son propensos al hackeo? Es por ello qué quienes se encargan de investigar las vulnerabilidades de las aplicaciones ofrecen diversos parches y actualizaciones para evitar poner en riesgo tu equipo y asegurarse que puedas navegar con tranquilidad.
- La curiosidad
El ser curiosos y darle click a aquellos links o anuncios que nos puedan parecer interesantes también pueden poner en riesgo nuestra seguridad digital, por eso procura visitar sitios web que se vean muy llamativos o que te ofrezcan oportunidades increíbles ya que suelen ser maliciosos y pueden invadir la privacidad de tu dispositivo.
- Registro en sitios web con usuario de redes sociales
Iniciar sesión con tu cuenta de Facebook o de otra red social en cualquier aplicación o sitio web no es un hábito conveniente ya que de esta manera tendrán acceso inmediato a tus cuentas, fotos e información personal. Es cierto que ya esta información es pública, pero pueden utilizarla para fines delictivos, de extorsión o simplemente estarás totalmente expuesto.
- Dejar el computador sin bloquearlo
Recuerda que no hay nada malo con dejar tu equipo por un momento a solas y descansar de la pantalla, pero hazlo siempre y cuando lo bloquees, de esta manera estarás protegiendo tu información y evitando que alguien malintencionado ingrese a tu equipo.
- Hacer muchas cosas al tiempo
Si, es cierto, nuestros equipos y dispositivos son multitarea, pero la mayoría de las veces esto puede representar un riesgo ya que al afectar nuestra concentración y productividad queda expuesta nuestra seguridad e inconscientemente podemos acceder a portales maliciosos, ser víctimas de phishing o llegar a descargar un malware enmascarado como un programa legítimo. Intenta no mantener una infinita fila de pestañas en tu navegador y concéntrate en cada proceso que haces.
- Registro múltiple
¿Eres consciente cuantas cuentas online tienes? ¿Cuántas usas frecuentemente? ¿En qué portales estás registrado?, si te cuesta recordar las respuestas tranquilo, siéntate a analizar dónde has registrado tu correo electrónico o tus datos personales, de esta manera lleva un control y sí es posible cancela suscripciones innecesarias. Todos estos hábitos se correlacionan ya que se han convertido en acciones frecuentes de los cibernautas y en ocasiones hasta mecánicas y no pensamos en las consecuencias. Tomate el tiempo de pensar y analizar tus comportamientos online, y así detectar en qué debes mejorar y aquello que debes evitar. La idea es que te conviertas en alguien a prueba de hackeo.